A Chiclayo se le conoció a nivel nacional por ser la ciudad donde un proyecto que pretendía mejorar el tratamiento de los residuos sólidos fracasó por la corrupción de sus autoridades. Sin embargo, el día de ayer, el actual alcalde provincial Marcos Gasco Arrobas indicó que la construcción de la planta de transferencia se estaría por volver a retomar, pero en esta oportunidad la unidad ejecutora será el Ministerio de Ambiente (Minam).

Como se recuerda, en marzo del año pasado, la Cooperación Suiza que durante el gobierno municipal de Roberto Torres Gonzales (2013) dio inicio al proyecto “Chiclayo Limpio” hizo oficial su alejamiento de la Capital de la Amistad, debido a una serie de retrasos y presuntos actos de corrupción en las gestiones anteriores. Anuncio que conmovió a la población y acabó con la esperanza de tener un lugar limpio donde vivir.

Gasco Arrobas sostuvo que al asumir su mandato (2019) recibió a la ciudad totalmente bombardeada de desperdicios y no se contaba con el recurso logístico suficiente para combatir esta problemática. Por lo que, la municipalidad provincial en abril llevó a cabo un contrato de tres meses con la empresa Veolia Servicios Perú S.A.C. para el recojo de basura.

Una vez reparada las maquinarias, la comuna volvió a encargarse del servicio. No obstante, las 13 compactadoras activas no son suficientes para las 223 toneladas que se generan a diario. A ello, se suma la contaminación del botadero de Reque, utilizado también por los municipios de José Leonardo Ortiz y La Victoria.

En medio de esta crisis, se conoció de un nuevo proyecto. Se trata de la construcción de una celda transitoria para la disposición final de los residuos sólidos de Chiclayo en un terreno que donó la Fuerza Aérea del Perú (FAP).

“Los suizos al ver esta performance y este trabajo transparente que se ha hecho, nos llamaron para decirnos que quieren continuar con la cooperación y que van a terminar con la planta de transferencia, donde se invertirán 11 millones de soles”, señaló el alcalde y añadió “no importa si es el Minam o cualquier otra institución (la unidad ejecutora), lo importante es que se haga”.

DESAFÍO

En tanto, para el regidor Percy Espinoza Ramos, el regreso de la Cooperación Suiza debe tomarse con bastante calma, debido a que primero se tienen que cumplir una serie de procedimientos. Sin embargo, se mostró de acuerdo con que el Minam sea la unidad ejecutora del proyecto. “No estaría mal, en el sentido de que la municipalidad tampoco ha dado muestras de capacidad operativa para poder resolver algunas cosas”, cuestionó.

Manifestó que es un gran desafío para el alcalde Marcos Gasco, en el sentido de que su gestión debe demostrar que está preparada en lo que se refiere al aspecto técnico, operativo y logístico para sacar adelante un proyecto de gran envergadura como lo es “Chiclayo Limpio”.

“Lo importante, es que la municipalidad dé muestras del valor que tiene para nosotros (la planta de transferencia) y asuma un compromiso para que no se vuelva a repetir la misma situación de las gestiones anteriores”, acotó.

Espinoza Ramos recordó que “Chiclayo Limpio” es una iniciativa que forma parte de los acuerdos bilaterales entre Perú y Suiza, por lo que debe existir algún interés por parte de los suizos de terminar la obra, pero antes requerirán ciertas condiciones.

SEGURIDAD CIUDADANA

Por otro lado, el alcalde Marcos Gasco mencionó que al asumir su gestión recibieron menos de 50 personas para el área de Seguridad Ciudadana, entre ellos policías municipales, agentes de fiscalización y serenos, pero en la actualidad la comuna chiclayana cuenta con alrededor de 300 personas y está solicitando 300 más.

“Sin embargo, el Organismo de Control Interno (OCI) se opone por simplezas burocráticas, por absurdos como si no fuese prioritario o emergente la seguridad ciudadana”, agregó.

En ese sentido, precisó que se reunirá con el contralor general de la República para hablar al respecto. “Ya estuve con el gerente del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) y la Autoridad Nacional del Servicio Civil – Servir. Vamos a hacer todo lo posible para lograr las contrataciones”.

A su turno, Percy Espinoza subrayó que OCI está para cumplir con las exigencias que determina la ley, por lo tanto no se puede culpar. Añadió que la responsabilidad es del titular del pliego y su equipo que no han cumplido con todos los procesos.