Aunque hasta el momento no se han registrado casos de dengue, zika o chicungunya en el distrito de Mochumí, el director del centro de salud, Abel Contreras Venero, manifestó que están tomando las medidas respectivas para hacer frente a posibles casos.
“El trabajo que realizamos fue específico, ingresamos a cada una de las viviendas del distrito, ubicamos las larvas y los zancudos en los envases que acumulan agua e inmediatamente los retiramos”, acotó.
Asimismo, Contreras Venero, señaló que el centro de salud está atento a cualquier síntoma sospechoso que pueda generar este tipo de enfermedades. De este modo, los pacientes sean inmediatamente evaluados y reciban el tratamiento acorde con la fiebre o deshidratación que presenten. Esto, hasta que se brinde el diagnóstico final.
Subrayó que en este momento, el personal está monitoreando de manera permanente los sectores más vulnerables, pues estos meses son críticos, debido a que la temperatura está en aumento y las condiciones ambientales serán propicias para que estos insectos se diseminen.
Otro de los motivos que podrían generar esta problemática es la falta de agua, que lleva a los moradores de Mochumí a almacenar el líquido elemento en diferentes recipientes. Por ello, recomendó a las familias lavar bien los recipientes y tener mucho cuidado.
Abel Contreras enfatizó que las medidas que están adaptando son parte de una política nacional, implementada por la Gerencia Regional de Salud (Geresa) y llevada a cabo por el personal de cada uno de los centros de salud.
Por otro lado, manifestó que los distritos más vulnerables al dengue, zika o chicungunya son Jayanca, Motupe y Olmos. En riesgo medio está Pacora, Íllimo y Túcume y con poca probabilidad Mochumí y Lambayeque.