Los alrededores del mercado Modelo de Chiclayo volvieron a ser espacios caóticos, ahora con el ‘plus’ de que los comerciantes ambulantes tienen más libertad para poder instalarse en las pistas y veredas, por la conocida ausencia del tránsito vehicular en la zona. El paisaje muestra a peruanos y extranjeros compartiendo la informalidad a vista y paciencia de quienes deberían poner orden.

 

Todo esto sucede a poco más de una semana de la Nochebuena y Navidad. Los ambulantes necesitan hacer su “agosto” en diciembre ante la limitación de las autoridades para ejercer control. Efectivos de la Policía Nacional, Serenazgo y Policía Municipal, se lucen en pequeños grupos en cada esquina cercana al Modelo, sin hacer nada más que reír frente a una situación que ya consideran “desbordada” por donde se mire.

 

Ofertando sus productos en la mano, sobre plásticos en el suelo o en colgadores móviles, el número de informales crece cada minuto más. Calles como Teniente Pinglo, Héroes Civiles, Arica, Cuglievan y demás lucen abarrotadas de vendedores que poco o casi nada les interesa que exista un mandato judicial que ordena la recuperación de espacios públicos en la periferia de este centro de abastos.

 

De vez en cuando los ediles intervienen a los ambulantes del Modelo, ocasionando que solo se generen peleas entre ambos bandos. Y es que los informales tienen como representantes y defensores a ciudadanos de origen venezolano, que no dudan en resguardar a como dé lugar la mercadería que se les encomendó vender. Migrantes se unen para hacerle frente a una Policía Municipal conformada por muchos jóvenes y mujeres.

 

Se debe mencionar que en los exteriores del mercado Modelo ya existen episodios en los que informales no solo agreden al personal, sino, también, a funcionarios; como el día en que le rompieron la ceja al gerente de Seguridad Ciudadana, Fiscalización y Sanidad de la Municipalidad Provincial de Chiclayo, Luis Miranda Orué. Ensangrentado aseguró que “están haciendo su trabajo”.

 

El Ministerio Público y el Poder Judicial ya remitió un informe a los funcionarios y alcalde de Chiclayo donde les indica, explícitamente, que la comuna no ha cumplido con recuperar el orden en los alrededores del Modelo a más de cuatro meses de iniciadas las labores; e incluso por el “incumplimiento” existe un pedido de detención de la Fiscalía al Poder Judicial contra Marcos Gasco Arrobas y otros funcionarios.

 

“En el documento indicaba como que no hemos hecho nada por ordenar (el exterior e interior del Modelo), por lo que se nos pide informar inmediatamente (a la Fiscalía y Poder Judicial). Es un apercibimiento, es un pedido de la fiscal al juez, pero ¿por qué está haciendo el pedido?, la fiscal no ve noticias o no ha salido a ver cómo nos enfrentamos todos los días, impidiendo que vendan en la calle”, declaró en su momento Orué Miranda.