El presidente de Chile, Sebastián Piñera, informó este jueves de un plan para terminar con los toques de queda que se han aplicado por cinco días consecutivos en varias regiones del país desde que estalló una crisis social la semana pasada.
Este plan se empezó a aplicar desde el miércoles en Santiago, donde el toque de queda se redujo a seis horas, de las 22:00 a las 04:00 locales, a diferencia de la noche anterior cuando fue de 10 horas.
Piñera decretó estado de emergencia el sábado, tras una violenta jornada de protestas el viernes por el aumento del precio del metro pero que luego se extendieron a otras demandas sociales, con saqueos a supermercados y negocios y la quema del múltiples estaciones del metro, que los primeros días quedó inmovilizado.
La crisis social ha dejado 18 muertos, cinco de ellos por la acción de las fuerzas de seguridad y el resto en medio de los saqueos y disturbios. Piñera anunció también que este jueves envió al Congreso un proyecto de ley para estabilizar el precio de la energía que permitirá anular una reciente alza a los precios de la luz del 9,2%, parte del paquete inicial de medidas con la que intenta hacer frente al estallido social.