Un total de 87 registros de marcas colectivas fueron entregados ayer en esta región en forma gratuita por el Instituto Nacional de Defensa de la Competencia y de la Protección de la Propiedad Intelectual (Indecopi).

 

La entrega benefició a artesanos y pequeños productores de bajos recursos económicos del departamento de Lambayeque.

 

Para tales efectos, desde Lima llegó el presidente del Consejo Directivo del Indecopi, Ivo Gagliuffi Piercechi, quien junto a la jefa de la oficina regional de esta dependencia, Ana Leyva Wong, fueron los encargados de extender los certificados a los beneficiarios.

 

Sobre el particular, Ivo Gagliuffi, destacó la importancia de ser marca colectiva, así como explicó la diferencia con una marca común.

 

“La marca común comercial la puedo crear en este momento y la registro con mi nombre, pero no tiene una historia detrás; sin embargo, la marca colectiva es lo que refleja toda una comunidad de productores que se asociaron para sacar un mismo producto, además que detrás tienen una historia basada en la unión y esfuerzo para impulsar sus frutos”, comentó.

 

El funcionario añadió que, como el pasado 5 de setiembre venció la gratuidad para obtener este certificado (la campaña duró dos años) el beneficio económico para todos los productores que ayer recibieron sus registros se vio reflejado en el ahorro de 65 mil soles por el no pago de las tasas, así como el costo de publicación en el diario oficial.

 

Por su parte, Ana Leyva, precisó que hasta el momento se van entregando, en toda la región Lambayeque, 135 registros de marcas colectivas, 24 en marzo del año pasado; 24 más en setiembre de 2018 y ayer, 87 certificados más, lo cual convierte a Lambayeque en una de las regiones con más entregas de estos documentos, ubicándose entre las cinco primeras del país.

 

Respecto a la diversificación de productos que se presenta, Leyva señaló la emblemática chicha de jora, además de la miel de abeja, algodón nativo, paja palma. También está la producción de animales como el cuy, carne de cordero, cabrito. Artesanías como lana de ovino y productos variados.

 

“La marca colectiva es ese signo que va a distinguir justamente a los productos y servicios que tiene cada uno de los productores en forma conjunta, en equipo a través de asociaciones”, enfatizó.

 

Asimismo resaltó que, como consumidores (los lambayecanos en este caso) resultamos privilegiados por tener en el mercado una gran gama de productos variados, entre los cuales resaltan los ancestrales.

“Hoy (ayer) entregamos su certificación a la primera asociación de personas con discapacidad en el país que ya cuenta con un registro de marca colectiva, lo cual nos convierte en consumidores privilegiados”, expresó.

 

Se trata de 17 artesanos con discapacidad visual y auditiva que conforman la Asociación de Artesanos con Discapacidad (Adadi), los mismos que se dedican a la elaboración de cerámica artesanal a base de barro o vidriado empleando técnicas ancestrales.

 

“Se trata de emprendedores afectados por el fenómeno de El Niño Costero que azotó el norte hace dos años. Esta asociación recibió cuatro registros de marcas que distinguirán artículos de bisutería y llaveros, productos de cuero y cuero de imitación, artículos de equipaje y bolsas de transporte, vasijas y jarrones de cerámica artesanal de barro cocido o vidriado, calzado y artículos de sombrerería”, refirieron.