Son cientos los ciudadanos venezolanos que salieron de su país en busca de una mejor oportunidad y, muchos de ellos, en la actualidad se encuentran radicando en Chiclayo y en otras ciudades del Perú.
Sin embargo, por las malas acciones de algunos, el presidente de la República Martín Vizcarra, anunció que a partir del sábado 15 de junio, solo podrán ingresar al Perú con pasaporte y visa debidamente reglamentados.
Frente a ello, Víctor Soto Cáceres, presidente del Consejo Regional de Decanos de Lambayeque, mencionó que desde el primer momento, el Ministerio de Relaciones Exteriores y Ministerio del Interior, debieron tomar precauciones necesarias.
Asimismo, sostuvo que el Ministerio de Salud, debió prever la cantidad de personas que iban a necesitar atención de salud. Esto, a fin de que no colapsen los sistemas. De igual manera, el sector Educación.
Sin embargo, al no haber sucedido lo mencionado, en la actualidad las autoridades locales y regionales tienen que pedir apoyo a los ministerios correspondientes y asumir con mucha responsabilidad lo que está sucediendo, agregó.
PERUANOS FUERA
A su turno, Luis Montenegro, coordinador de la Mesa de Concertación de la Lucha contra la Pobreza de Lambayeque, sostuvo que el Perú y Lambayeque ha demostrado que no tiene la capacidad para recepcionar a una alta cantidad de personas, que han dejado todo para sacar adelante a sus familias.
Recordó que en el gobierno de Juan Velasco, Alan García y Alberto Fujimory, muchos peruanos migraron fuera y en la actualidad, un promedio de tres millones y medio de compatriotas viven en otros países y todos ellos sí han sido recepcionados, añadió.
En ese sentido, Luis Montenegro, precisó que las autoridades y ciudadanos de a pie debemos ser generosos y no calificar a todos por igual, por dos o tres extranjeros que han cometido errores.
Sin embargo, dejó claro que desde el principio el Gobierno no desarrolló ningún tipo de filtro para evitar que ingresen extranjeros con antecedentes penales o judiciales.
APOYO
En su momento, Janinna Sesa, directora de Cáritas Chiclayo, manifestó que si bien es cierto el comercio ambulatorio en la Ciudad de la Amistad se ha incrementado, las autoridades municipales, deben reubicar tanto a los comerciantes peruanos como venezolanos en una zona estratégica, donde puedan vender sus productos.
Explicó que junto a la Iglesia Católica, no justifican los actos delictivos. Por el contrario, ayudan a quienes lo necesitan. “Acudimos al desprotegido, al que no tiene que comer, a los niños que están en las calles, a las familias que duermen en las plazas”, afirmó.
