El desorden, informalidad e inseguridad que se vive en Chiclayo o llamada Ciudad de la Amistad no ha logrado mejorar en estos dos meses de gestión, es por eso que la Prefectura Regional pide unión a todos para mejorar la imagen de la urbe.

 

El año pasado, la prefectura recibió el malestar de los vecinos del centro de Chiclayo, quienes mediante documentos daban cuenta del desorden que se vivía por las principales calles y avenidas.

 

La prefecta regional, Claudia Asenjo Uriarte expresó que comunicó a la municipalidad, fiscalía y policía para que tomen las cartas en el asunto y actualmente se ve al personal municipal erradicando a los comerciantes ambulantes que pululan durante todo el día.

 

“Vemos que los municipales están trabajando, pero también observamos que no estamos preparados para ver la forma tan violenta en que son tratados los informales”, acotó.

 

Explicó que no es que la autoridad genere violencia contra ellos (informales), sino que estas personas abusan de su condición de humildes, o ser mujeres para evitar sean despojados de su mercadería.

 

De manera paralela, la autoridad edil debe buscar la manera como formalizar a los comerciantes, subrayó.

 

“Es cierto que los comerciantes generan desorden y contaminación, pero también es cierto que se tiene que buscar el diálogo y que el alcalde tenga espacios donde se puedan reubicar”, comentó.

 

La prefecta explicó que la autoridad municipal está combatiendo un problema, pero se genera otro, como lo es la limpieza pública, donde por varios días, los obreros paralizaron sus labores.

 

“Es lamentable ver cómo está el distrito, con varios problemas, pero sabemos que la municipalidad está atravesando por un momento crítico que debe superar por el bienestar de todos”, finalizó.