La próxima semana todos los niños y adolescentes vuelven a clases. Para muchas madres empieza el dolor de cabeza, pues no saben qué alimentos incluir para obtener una lonchera saludable. Carmen Izquierdo Torres, especialista en nutrición del Centro de Salud El Bosque de La Victoria brinda las siguientes recomendaciones.
Una lonchera saludable consta de tres grupos de alimentos. El primero es el energético en el cual están incluidos los almidones (fideos, arroz, avena, quinua, etc.), como su nombre lo indica, aportan energía para que los niños y las niñas se desplacen y no se duerman en clases.
El siguiente grupo, mencionó Izquierdo Torres, son los alimentos constructores; es decir; todo tipo de carnes (pescado, pollo, res, atún, huevos, etc.). Los cuales influyen en el crecimiento físico de los menores de edad.
Por último, están los alimentos reguladores que incluyen a todas las verduras frescas, especialmente aquellas que se consumen crudas. Sirven para evitar enfermedades. Por ello, se aconseja incorporarlas diariamente en la lonchera de los escolares, precisó.
Si se incluye a estos tres alimentos y se agrega el consumo permanente de agua (ocho vasos al día) por los altos grados de calor que se están registrando en Lambayeque, los niños y las niñas tendrán un desarrollo saludable, rendirán mejor académicamente y fomentarán su creatividad.
Las madres pueden incluir en las loncheras, un pan con pollo y lechuga, su refresco de maracuyá y una porción de 12 uvas, sin exagerar en cantidad. Asimismo, expresó Carmen Izquierdo, otra opción es un pan con sangrecita en saltadito, una mandarina o manzana y un jugo de naranja.
La especialista indicó que los alimentos pueden variar, pero es importante que las madres tengan en cuenta que una lonchera nunca reemplaza al desayuno. Los niños y las niñas tienen que tomar su desayuno, de lo contrario su metabolismo sufrirá alteraciones.
Por otro lado, sostuvo que la Ley 30021 a través del artículo cinco promueve la alimentación saludable y de la educación nutricional. Por tanto, los quioscos de los centros educativos deben reemplazar las comidas chatarras, pues tienen altos grados de glucosa y hacen que el cerebro de los estudiantes no funcione como debería.
Culminó diciendo que en los quioscos se deberían vender frutas de acorde a la estación, por ejemplo en estos momentos la uva.