Declarar en emergencia al distrito de Pacora por contaminación con arsénico, es la medida a seguir, tras conocerse el informe que da cuenta que niños de la zona resultaron afectados, señaló el gerente regional de Salud, Jorge Ordemar Vásquez. Hoy, autoridades locales y regionales se reunirán para evaluar el pedido.

Como dio a conocer La Industria, un informe del área de Atención Integral de Salud Estrategia Sanitaria de Metales Pesados y OSQ, de la Gerencia Regional de Salud (GERESA) da cuenta del riesgo al que están expuestos los menores, quienes consumieron agua de pozo contaminada con arsénico.

Según este documento, del total de 312 niños, entre 6 a 12 años de edad, de la zona urbana y diferentes caseríos del distrito de Pacora, sometidos a un análisis de sangre y orina, los exámenes revelaron que del total de niños evaluados, el 53.5% dio positivo y el 46.5%, negativo.

EMERGENCIA

El gerente regional de Salud, Jorge Ordemar Vásquez, señaló que tras conocerse la situación de Pacora por la contaminación con arsénico que afecta a la población, en especial a niños, no se trata de buscar responsables sino una intervención multisectorial con la municipalidad, gerencia de salud y otras instituciones, para evitar que se siga consumiendo el agua contaminada.

voz de alarma

“Estamos en voz de alarma, tenemos que intervenir. Con un grupo de médicos vamos a ir a verificar si esos niños tienen síntomas clínicos de la enfermedad”.

Sobre declarar en emergencia al distrito, Jorge Ordemar indicó que sería la medida que debería tomarse, según las normas legales. Pedido que tendría que formular la propia municipalidad y dirigirla al Gobierno regional de Lambayeque, para que a su vez este quien lo solicite al Gobierno central.

El informe, precisa, da cuenta que hay niveles de contaminación por arsénico. “Mi informe dice que son niveles no aceptados por la Organización Mundial de la Salud. Confirman la intoxicación”.

El gobernador regional, Anselmo Lozano, quien acudirá a Pacora, señaló que se busca aliviar la situación con la instalación de una planta de tratamiento como ocurrió en Mórrope.