Local
Publicado el Miercoles, 09 de Octubre del 2019

Destacan la grandeza humana, militar y política de Miguel Grau

Grau fue un patriota, un ejemplo de integridad, compromiso y de servicio al país.

 Autoridades civiles y militares recordaron la gesta que en 1879 protagonizaron el almirante Miguel Grau Seminario y su dotación, en el legendario monitor Huáscar en el Combate de Angamos. Fue durante una ceremonia cívico-patriótica que se realizó en la plaza Miguel Grau del distrito de La Victoria.

La ceremonia contó con la presencia de las principales autoridades regionales civiles y militares, encabezadas por el gobernador regional Anselmo Lozano Centurión, la prefecta regional Ana Ubillús Ticlla y los jefes militares de la Marina de Guerra (Capitanía de Puerto de Pimentel), Ejército, Fuerza Aérea y Policía Nacional.

En ella se recordó que el 8 de octubre al ser una fecha muy significativa para la historia de nuestra patria, el Congreso de la República y el Gobierno de la Nación mediante Ley Nro. 23938 del 5 de octubre de 1984 instituyeron que todos los años a las 9:50 horas del 8 de octubre, se guarde un minuto de silencio en todo el territorio nacional, así como en los locales diplomáticos establecidos en el extranjero como recuerdo y homenaje al gran almirante del Perú, Don Miguel Grau Seminario.

En la acción litúrgica oficiada por el capellán del Ejército Peruano, Marcial Muñoz Mego, este se preguntó de dónde le vino a Miguel Grau ese porte singular, excepcional, para ser reconocido el Hombre del Milenio del Perú.

Para responder a esta interrogante leyó la carta del almirante Miguel Grau Seminario a su gran amigo Francisco Paz, que la escribe justo antes de embarcarse al combate que lo llevara a la gloria.

“Amigo, me voy para no volver. Esta mañana, en la iglesia de Los Descalzos me he confesado y he recibido la comunión y estoy en este momento preparado para entregar mi alma a Dios”, leyó el capellán del Ejército.

“De esta manera encontramos la respuesta de la grandeza humana emocional y espiritual. Tan extraordinario militar político, buen padre, esposo ejemplar y una fe inquebrantable en Dios”, señaló.

En el discurso de orden el Capitán de Puerto de Pimentel, Capitán de Corbeta Ivar Burneo Flores, recordó la gesta del Caballero de los Mares, Miguel Grau Seminario.

“En esa misma convicción del hombre de mar, quedó grabada hace 140 años en punta Angamos, cuando la tripulación del monitor Huáscar, al mando de nuestro gran almirante Miguel Grau Seminario, protagonizó uno de los capítulos más memorables que se han escrito, no solo en la historia de nuestra patria, sino en la historia de las guerras que se han dado en el mar”, señaló Ivar Burneo Flores.

“Hoy conmemoramos a nuestros compañeros de armas aquellos héroes contemporáneos de la pacificación en el momento que les tocó cumplir con su deber. No dudaron en ofrendar su vida por la Patria. También aquellos que sufren alguna discapacidad”, dijo.

Señaló que la Marina de Guerra del Perú ha sido parte en la vida nacional, a través de acciones concretas que fortalecieron el liderazgo en la región. Recordó que fuimos pioneros en la navegación a vapor al adquirir el buque Rímac, circunnavegar el mundo a bordo de la fragata Amazonas y desarrollar la industria naval con el establecimiento de la factoría de Bellavista en el Callao y en Iquitos en el años 1845.

“Conscientes de la importancia de dimensionar y consolidar una Marina moderna, flexible y dinámica que responda a la amplitud funcional que se nos ha asignado acorde con los retos y desafíos que el presente y futuro nos demandan. Mantenemos actualizados nuestros planes estratégicos en las áreas operacionales de personal y material a fin de tener una institución eficiente y profesional que sea competente en el cumplimiento de sus tareas y capaz de desenvolverse ante las nuevas estructuras del orden mundial”.

Suscríbete a La Industria

Disfruta de nuestro contenido a diario