Las bancadas Peruanos por el Kambio (PPK), Liberal, Nuevo Perú, Frente Amplio y Unidos por la República presentaron ayer lunes su renuncia a la Comisión de Ética Parlamentaria.
En oficio dirigido al presidente del Congreso, Pedro Olaechea, los voceros de estas agrupaciones políticas indicaron que la decisión se adoptó luego de que las distintas solicitudes formuladas para la recomposición y presidencia de Ética fueran “completamente ignoradas”.
El documento refiere que pidieron, en varias oportunidades, respetar el acuerdo de la Junta de Portavoces de mayo de 2018, que había establecido retirar de la presidencia de Ética a Fuerza Popular, y que se atienda una recomposición equitativa de sus integrantes.
Las bancadas coincidieron en que con ello se buscaba evitar la arbitrariedad en el manejo de la comisión y asegurar un mayor equilibrio en las decisiones que se adopten.
No obstante, advirtieron, se ha mantenido a la congresista Janet Sánchez en la presidencia, “pese a ser evidente su vínculo con Fuerza Popular”.
De igual forma, cuestionaron que la recomposición solo implicara incorporar un representante de cada grupo parlamentario “sin apostar por un verdadero equilibrio, ya que Fuerza Popular mantiene ocho representantes”.
“En ese contexto, se vienen presentando las mismas condiciones que se dieron en abril de 2018 y que produjo la crisis de legitimidad que tiene esta comisión”, añadieron.
El documento lleva la firma de los voceros de PPK, Clemente Flores; de la Bancada Liberal, Gino Costa; de Nuevo Perú, Indira Huilca; del Frente Amplio, Hernando Cevallos; y de Unidos por la República, Patricia Donayre.