La dama piurana adoptada hace muchos años por la ‘Ciudad Evocadora’ de Lambayeque, Elena Emperatriz Adrianzén Huamán, el día de hoy está cumpliendo 100 largos años de vida y decidió iniciar su fiesta tomando un coctel de algarrobina, en compañía de sus dos hijas, nietos y bisnieta.
Doña Elena, nació el 18 de agosto de 1919 en Huancabamba Piura, hasta donde llegó el lambayecano Cipriano Rodríguez Fernández, para trabajar como administrador de una hacienda en la zona y luego de conocer a doña Elena, se casaron y vivieron en la hacienda, para luego de muchos años venirse a vivir a Lambayeque
Ya instalados en la Ciudad Evocadora, ella inició su labor de maestra en su colegio inicial Nuestra Señora de Fátima de Chiclayo, ubicado en la calle Juan Cuglievan, en la misma cuadra donde hoy funciona el Banco de Nación, mientras que su esposo trabajaba en su establo.
Mientras conversábamos con una de sus hijas, doña Elena miró la foto de don Cipriano, recordando el mejor secreto. El gran amor que por años vivieron, fruto de esa unión matrimonial nacieron sus dos hijas. Blanca y Gladys. Ahora, doña Elena tiene cinco nietos, Héctor, Sebastián, Fernanda de Fátima, Fabricio y Paola. Además, tiene bisnietos. Carlos Andrés, Kiara Valentina, Matías Joaquin y Nolán Javier.
“Mi madre se encuentra con un muy buen estado de ánimo, come sola, no tiene enfermedades. Le gusta conversar, escuchar misa, canta y se moviliza sola con su andador. Recuerda mucho las cosas del pasado”, nos comenta Gladys Rodríguez Adrianzén, hija de doña Elena.