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Publicado el Viernes, 05 de Julio del 2019

Reclaman por gusanos en menú del comedor de la Beneficencia

Reclamante puso como testigo a la funcionaria responsable del área que controla la preparación de alimentos.
 La presencia de gusanos en el menú que se expende en el comedor de la Sociedad de Beneficencia de Chiclayo fue asentada en el Libro de Reclamaciones de esta entidad.
 
Así consta en el folio 00030 del 27 de junio de 2019 de dicho libro, donde la reclamante detalla a grandes rasgos el hecho sucedido cuando degustaba el plato solicitado (arroz con chancho).
 
“El día de hoy antes de terminar de comer, cuando estaba masticando la carne advertí dentro de la carne de chancho dos gusanos, cosa que me sorprendió y se los mostré a mis amigas, Pamela Aurazo y Paola (trabajadora de la institución) y pese a ello tuve que pagar el plato de comida”, se lee en el libro de reclamaciones.
 
Ante esto, La Industria indagó por lo ocurrido buscando a las personas que se cita en el libro. Se precisa que la reclamante al ser contactada por este diario aceptó haberlo escrito, pero se negó a que su nombre aparezca en esta nota periodística.
 
Al consultar en la misma Beneficencia por “Paola”, que, según el libro es “trabajadora de la institución”, se conoció que se trataba de la nutricionista de la entidad, Angella Paola Ruiz Uceda, quien además es la subgerente de Asistencia Social de dicha Beneficencia y a su vez responsable del cuestionado comedor.
 
Al ser consultada, la funcionaria aceptó ser la persona que se menciona (como testigo) en el reclamo, pero se disculpó de brindar alguna declaración por no contar con la autorización de sus superiores. “… claro, yo he estado en la misma mesa…”, solo atinó a decir.
 
 
FISCAL
 
La otra persona que aparece como testigo en dicha demanda es Pamela Aurazo, con quien La Industria también conversó. Al contactarla se corroboró que se trataba de la fiscal, Pamela Aurazo Colchado.
 
La magistrada expresó que ella no estuvo el día de los hechos, “pero sí me contó mi hermana (trabajadora de la Beneficencia), que sí los había visto (a los gusanos), pero me dijo que eran de choclo”, refirió Aurazo, la misma que cree que la demandante confundió su nombre con el de su hermana, con la que también es amiga.
 
“Mi hermana me contó que vio los gusanos, pregúntenle si gustan…pero sí me ha contado ese incidente…”, refirió.
 
 
EL GERENTE
 
También se buscó la versión de la entidad, trámite en el que el presidente de la Sociedad de Beneficencia de Chiclayo, Oswaldo Mendoza Otiniano, delegó a su gerente, Oscar Tirado Gálvez.
 
El funcionario explicó que la demanda pasó al área correspondiente (nutricionista) para que remita el informe respectivo; es decir, el documento lo deberá elaborar Paola Ruiz, quien es la “testigo” del hecho, según la reclamante.
 
“En cuestiones preliminares se me ha dicho que ese día (27 de junio) se elaboró más de 50 platos (de menú) y no tuvo reclamo de ninguno de los comensales, por eso se está pidiendo un informe para determinar si existe responsabilidad y si en realidad sucedió lo que la usuaria está reclamando”, enfatizó Tirado.
 
Al preguntarle ¿no habría un conflicto ético porque el informe lo elaborará la subgerente del área y testigo del hecho a la vez?, Tirado respondió.
 
“Ella tiene que hacer el informe respectivo…al salir de testigo prácticamente se está inculpando ella misma, no puedo dar como cierto esto hasta que ella me eleve su informe”, declaró.

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