Regional
Publicado el Lunes, 17 de Junio del 2019

Faltan cámaras para detectar más puntos de venta de droga

Ferreñafe espera contar pronto con cámaras para mejorar el trabajo en seguridad.
 La instalación de cámaras de video vigilancia es un proyecto que esperan desde siempre los ferreñafanos, esto ayudaría no solo a combatir la delincuencia sino también la drogadicción.
 
El subprefecto provincial, Ismael Sánchez Purihuamán, mencionó que en lo que va del año no se ha registrado ningún robo al paso, pero sí hay casos de consumo y venta de drogas en las unidades vecinales.
 
“Realizamos un trabajo permanente con la policía, municipio y juntas, todos estamos en comunicación con los dirigentes y líderes de cada unidad vecinal, nos informan de manera anónima y pedimos la intervención de la policía”, acotó.
 
En la unidad vecinal Alto Perú, se detectó seis puntos de venta de drogas, por lo que se erradicó y formó cuadrillas juveniles, quienes se mantienen vigilantes.
 
“Hemos conversado con la alcaldesa, Violeta Muro a fin que en el presupuesto participativo que se elabora en este año, se incluya el proyecto de la adquisición de cámaras, esto aportaría en el trabajo de la policía”, acotó.
 
En la provincia se cuenta con 135 juntas vecinales y 74 efectivos policiales.
 
Las 41 unidades vecinales de Ferreñafe cuentan con un teniente gobernador, presidente y juntas vecinales.
 
Además, en el distrito de Pueblo Nuevo son 21 juntas vecinales, Manuel Mesones Muro 16, Incahuasi 68, Cañaris con 74 juntas vecinales y Pítipo con 41.
 
La policía cuenta con cinco patrulleros y seis motos lineales que están sectorizados. Las motos lineales generalmente recorren todo el distrito, pero con mayor frecuencia donde hay una mayor cantidad de personas como los mercados, al detectar alertas comunican a los patrulleros e inician la vigilancia.
 
También se ha podido acabar con los robos en las cosechas de arroz, hasta hace dos años, los asaltos en las chacras eran incontrolables, se llevaban los sacos listos para vender en el mercado.
 
El trabajo coordinado también ha permitido controlar los bailes callejeros, al no contar con permisos municipales se interviene e impide que instalen los toldos en plena vía pública.

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