Los turistas que a diario visitan los Andes centrales peruanos, los han catalogado como una de las cordilleras más impactantes del planeta. El Callejón de Huaylas es un destino de encantadora belleza que es una alternativa a Machu Picchu y cautiva sobre todo a los amantes del turismo de aventura y vivencial.
Para los turistas, el Callejón de Huaylas configura una gran cadena de montañas nevadas dueñas de una impresionante altura que invitan a contemplar su majestuosa belleza haciendo caminata o intentar coronar sus cumbres si se practica el alpinismo.
Dentro de esta vastedad montañosa la publicación internacional resalta a la ciudad de Huaraz, considerada como la “Capital del Trekking” o caminata a campo libre del Perú. Por ello, concita una creciente presencia de visitantes interesados en cubrir rutas de gran extensión para contemplar la bucólica belleza de los valles interandinos con su singular flora y fauna, lagunas de color turquesa y colosales picos nevados.
Una de las rutas más populares es la de Santa Cruz, de 45 kilómetros de longitud y permite ascender en su punto más alto ubicado a 4,750 metros sobre el nivel del mar. En este periplo de inolvidable experiencia turística destaca el ascenso a la laguna Churup, conocida como la “Laguna de siete colores”, localizada a más de 4,000 metros de altitud y a pocos kilómetros de la ciudad de Huaraz.
El Callejón de Huaylas forma parte del Parque Nacional Huascarán, una de las primeras áreas naturales protegidas del Perú, creada el 1 de julio de 1975. Dos años después fue declarado Reserva de Biosfera por la Unesco; y en 1985 fue incluido en la lista de Patrimonio Natural de la Humanidad.
Con una extensión de 340,000 hectáreas, el Parque Nacional Huascarán ocupa parte de las provincias de Huaylas, Yungay, Carhuaz, Huaraz, Recuay, Bolognesi, Huari, Asunción, Mariscal Luzuriaga y Pomabamba, en el departamento de Áncash.