La esperanza se fortalece en el Dios de la vida cuando las familias escolares se unen para celebrar el acontecimiento más importante ocurrido en la historia de la humanidad: la Resurrección de Jesucristo.

 

Desde el corazón de las escuelas del norte peruano adscritas al programa La Industria en la Educación queremos expresarles nuestro saludo de paz en esta Pascua, en la que el amor de un Dios se puso de manifiesto para cambiar la historia de la humanidad. De las sombras a la luz, de la muerte a la vida, de la esclavitud a la auténtica Libertad, ese es el mensaje que Jesús nos transmite desde la cruz, desde la tumba vacía, desde la nueva vida a la que él nos invita a vivir.

 

Es tan bonito ser libres, pero auténticamente libres, esa libertad que te permite vivir sin causarte daño, ni mucho menos dañar a quienes te rodean, expresaron escolares y maestros al celebrar que, ¡Cristo Vive! En esta página, más ilustrativa que escrita, deseamos compartir la alegría de las familias escolares que celebran la Vida en abundancia, forjada en la cruz de Cristo y que nos llena de fe, esperanza y amor en nuestro paso por la Tierra, para poder cumplir la misión que tenemos encomendada: ¡Amarnos los unos a los otros como Jesús nos ama!, este es el sentido de la vida.

 

Oremos porque en nuestra Patria todos comprendamos que el accionar basado en el amor es lo que nos llevará a siempre trabajar por el Bien Común, para que la convivencia en nuestra Nación sea armoniosa y nos conduzca al fortalecimiento de la Paz. ¡Felices los que trabajan por la Paz porque en ellos habita el corazón del mismo Dios!