Un aproximado de mil 100 millones de soles en deudas dejó la gestión regional que lideró Humberto Acuña Peralta a su sucesor, Anselmo Lozano Centurión, quien ayer juró como gobernador regional de Lambayeque.

 

Fuentes pertenecientes al equipo de transferencia confiaron a La Industria que estos compromisos impagos corresponden a aportes provisionales, deudas judiciales y cuentas por pagar diversas, las mismas que en bloque superan los 900 millones de soles.

 

Además, existe otro grueso rubro por pagar, como son las deudas en el sector Educación, las mismas que, según se conoció superan los 200 millones de soles, con lo que el total de los compromisos a cancelar por la gestión de Lozano Centurión superaría los mil 100 millones de soles.

 

 

 

Ante tremenda cifra, La Industria entrevistó al exgobernador regional, Humberto Acuña, quien enfatizó que esta deuda no es algo que haya generado sus gestiones (dos periodos), y aunque en primera instancia manifestó que el monto (mil millones de soles) “me da un poco de gracia escucharlo”, al final terminó aceptando la gigantesca cifra.

 

“(La deuda) se viene arrastrando hace años…son deudas sociales, más del 90% son deudas sociales”, mencionó Acuña.

El exmandatario lambayecano indicó que dentro de este paquete está la deuda del proyecto Trasvase de Olmos, la cual, según dijo, asciende a 25 millones de dólares anual, la misma que explicó, se paga a través de una transferencia que la hace el Gobierno Central.

 

Agregó que estas deudas también comprenden laudos arbitrales, como el de la Avenida Chiclayo y otros más pequeños; además de embargos judiciales, pago a los trabajadores, litigios, reintegros, preparación de clases, etc.

 

“El Estado Peruano nunca ha tenido la voluntad de pagar esas deudas sociales y nosotros siempre lo hemos dicho en todos los mensajes…incluso la primera vez que conversamos con Ollanta Humala (expresidente de la República) en Palacio, hablamos de la deuda social que era impagable”, manifestó.

 

Acuña enfatizó que, del total de los compromisos por pagar que deja, el 90 por ciento serían deudas sociales, lo que significaría, según él, que su gestión hereda a Lozano Centurión más de 100 millones en deudas por pagar que no son compromisos sociales.

 

 

 

También dialogamos con el secretario general del Sindicato Único de Trabajadores Administrativos de Centros Educativos (Sutace), Ulises Díaz Ruiz, quien responsabilizó directamente al exgobernador, Humberto Acuña, de la gran deuda social generada en sus dos periodos de gobierno.

 

“La mayor cantidad de afectados con estos compromisos impagos somos los del sector Educación, principalmente maestros, más de 14 mil personas, todo porque no existió la voluntad política para gestionar los pagos y dejaron pasar el tiempo, lo cual provocó a que esto se vaya acumulando, cuando lo más sensato hubiera sido buscar el mecanismo para el pago de manera paulatina”, comentó.

 

También criticó la dejadez de Acuña de gestionar el presupuesto para la cancelación de estos compromisos, los mismos que debió agilizar en Lima, más aún –afirmó– siendo el presidente de la Asamblea Nacional de Gobiernos Regionales, lo cual le daba un acercamiento especial al primer ministro.

 

“Prefirió irse al Mundial de Fútbol, claro, haciendo uso de sus vacaciones, justo cuando se iba a discutir los recursos para pagar la deuda social. De los 200 millones de soles de adeudos en el sector Educación, Lambayeque solo recibió tres millones, porque no hubo voluntad política para darle solución”, refirió.