La falta de sueldos motivó al personal con Contratos Administrativos de Servicios (CAS) de la Municipalidad Provincial de Chiclayo a protestar durante la sesión de concejo que se desarrolló ayer en el Palacio Municipal.

 

Algunos todavía laboran en las diferentes áreas de la comuna y otros son extrabajadores que llegan todos los días a reclamar por sus pagos.

 

“Nos deben desde los meses de noviembre, diciembre y la gratificación. Cada uno percibe un sueldo de 1000 soles”, indicó la trabajadora de la gerencia de Seguridad Ciudadana, Bety Díaz.

 

Del total de 300, ahora solo quedan 20 trabajadores, quienes esperan los pagos. Indicaron que en el mes de noviembre concluyó su contrato y ya no renovaron por la crisis económica que se vive en la administración pública.

 

“Nos explotaban, cumplíamos con horas extras, no contábamos con herramientas necesarias para trabajar, pero aun así se tenía que cumplir con la tarea”, dijo la extrabajadores de limpieza pública, Isabel Huancas Salvador.

 

Similar situación es para los policías municipales y serenos, quienes también llegaron a protestar.

 

Un caso que llamó la atención fue de María Aguilar Chávez, una señora que trabajó hasta el 16 de setiembre del 2018, durante más de 19 meses como barredora, los mismos que le adeudan.

 

Le prometieron un sueldo de 900 soles al mes y hasta ahora no recibe nada.

 

La humilde mujer contó que su familia es beneficiaria de un comité de Vaso de Leche en el sector Sagrado Corazón de Jesús y a la vez apoyaba en las movilizaciones o las conocidas portátiles, en favor del alcalde suspendido de Chiclayo, David Cornejo Chinguel.