Muy temprano en la mañana
nuestros héroes caminando van,
nuestra escuela los espera
para a los niños alegrar.
El maestro Juan desde La Victoria
llegó para trabajar.
El joven Jhony no se hizo esperar,
es por los niños dijo,
y se unió sin dudar;
Caramba, dijo el maestro Roberto
no faltaba más, es por nuestros niños:
¡Vamos a trabajar!
Ah miren quién viene por allá...
¿Quién más?, es la señora Hortensia
y su hijo incondicional,
siempre uniéndose a las nobles causas,
llegaron para apoyar.
Ni que decir de la señora Rocío,
que junto a su esposo
son la mano hermana de la familia escolar.
Infaltable nuestra señora Angelita,
tempranito estuvo ya,
preocupada para que nadie se quede sin alimento,
presurosa indica: ¡para todos debe alcanzar!
Esta es mi Familia de la Paz,
exclama la miss Jeny,
emocionada con tanto afán;
ya van 88 bolsas, son 456;
escribe por el grupo Whatsapp;
ella solicita: unidad al orar.
Estamos todos unidos
escriben los maestros de la Paz:
¡Ánimo que de seguro la meta se logrará!
¡Ah!, pero, pensaron que nuestra Directora no está?...
Miss Anita silenciosamente
desde hace meses reclama,
para sus niños el pan,
y junto a su Naomi se unen
para trabajar:
¡A nuestros niños hay que alimentar,
y sus cuadernos de trabajo
debemos entregar!,
expresa con su sonrisa angelical.
Ya llegamos a 110 bolsas,
expresa nuestra Sub Jeny
y llena de hermosas fotos el WhatsApp.
¡Vamos comisión CAE!,
qué nuestra Dulce Madre,
Nuestra Señora de la Paz,
también se sumó al equipo,
y el Niño Jesús de sus brazos
se desprendió para ayudar…
¿Creían que estaban solos?
Nada que hablar,
allí está el cielo entero,
allí donde se trabaja por la PAZ.
