Son seis personas que integran la Estación de Bomberos Nº 174 de Olmos, quienes tienen todas las ganas de ayudar cuando se registran emergencias, pero se ven impedidos al no contar con un chofer y con baja dotación de combustible.

 

“De presentarse un incendio, tenemos que buscar un chofer, alguien que nos quiera ayudar en la emergencia y eso demanda tiempo que no es favorable cuando se trata de una emergencia”, señaló con indignación el comandante de estación, Miguel Enrique Chuzón Cabrejos.

 

Cuentan con una ambulancia y una cisterna contra incendios, pero que están paralizadas por la falta de un chofer. El comandante explicó que la Intendencia Nacional de Bomberos les retiró el chofer, quien en sus ratos libres apoya, pero no es algo seguro.

 

Además, les faltan equipos de protección, con los que cuentan están deteriorados y se exponen a que resulten heridos atendiendo una emergencia.

 

“Ojalá el gobierno se acuerde de nosotros y nos apoye porque las necesidades son múltiples”, comentó.

 

El hombre de rojo explicó que ante una emergencia, las unidades móviles no cuentan con suficiente combustible y por ahora están a la espera que la Intendencia les recargue las tarjetas. “No estamos al 100% de combustible, nos han dicho que tenemos que acabar lo poco que tenemos para que nos recarguen, pero si hay una emergencia podemos quedarnos a mitad de camino”.

 

Los casos que más se presentan y que son atendidos por los bomberos son los incendios forestales, en ese sentido reiteró que se necesita con urgencia renovar los equipos de protección a todos los voluntarios.

 

En los dos últimos meses se han registrado 12 incendios en los sectores de Miraflores, La Estancia, Imperial, entre otros, donde el algarrobo permite el aumento de llamas e impide a los bomberos realizar su trabajo.

“Al año podemos registrar más de 40 incendios forestales, es lo más común, que incendios en casas”, acotó.

 

Últimamente se registró un incendio en el mercado, siendo algo difícil llegar con las unidades móviles porque se trata de un reducido espacio y desorden.

 

Los hombres de rojo no solo piden a las autoridades que se interesen por la problemática, sino a la población para que se interese en ayudar a mejorar la logística que ayudará al mismo pueblo.