Julio es un mes especial, que nos permite recordar la Independencia del Perú. Asimismo, el compromiso que tenemos todos los peruanos, a fin de contribuir a la mejora del país que nos vio nacer.
La Industria llegó hasta el acogedor hogar de Hugo Vera Criollo, un destacado maestro de Educación Cívica y Ciencias Sociales jubilado, que recuerda con nostalgia esos tiempos de antaño, cuando se enseñaba con el ejemplo, la palabra y la disciplina en las instituciones educativas.
En esas épocas, menciona, los padres de familia agradecían la corrección hacia sus hijos. Sin embargo, los tiempos cambiaron. En la actualidad, un docente no puede hacer ni decir nada, porque se pueden suscitar denuncias en su contra.
Vera Criollo indica que todo era parte de un proceso, para formar personas de bien. Claro, sin caer en el abuso. Por ejemplo, en los colegios premilitares, no solo se aprendía a saludar o a entonar el Himno Nacional. Se educaba el carácter, vigorizaba el cuerpo y fortalecía el espíritu. No solo de la juventud estudiantil sino de toda la ciudadanía.
Por ello, la educación cívica tiene una importancia única y debe continuar dictándose en todos los centros educativos, pues permite enseñar valores, como el honor y el deber, a aquellos que carecen de moral. Del mismo modo, a los rutinarios que viven dentro de rígidos moldes, les infunde iniciativa para que se conviertan en seres capaces de crear y vencer lo imprevisto.
A los que no respetan las jerarquías, las leyes y que están en pugna constante con las normas de la sociedad, les inculca disciplina, no como fuerza que corrige, sino como orden y método con los que se armoniza el conjunto.
Asimismo, a aquellos, que dicen todo comprenderlo y no terminan nada, les permite ser perseverantes como medio de triunfar en la vida y de perfeccionar, rehaciendo, lo que no dio buen resultado, y lo más importante, infunde el patriotismo, que no es otra cosa que el amor sin reservas a la patria, subrayó el ilustre docente.
CONSECUENCIAS
Cabe mencionar, que el Ministerio de Educación (Minedu) al elaborar la Currícula Escolar Nacional fusionó el curso de Educación Cívica con el de Persona Familia y Relaciones Humanas. El cual, en la actualidad se dicta tres horas a la semana. Muchos especialistas no están de acuerdo, porque señalan que ambas materias son importantes y requieren de un tiempo prudente para el aprendizaje de los escolares.
De igual manera piensa Hugo Vera, quien además considera que esa unión de materias, es uno de los motivos por el cual la violencia de todos los tipos, tanto en las familias, los colegios, el trabajo, las vías públicas y demás se ha incrementado.
Por tanto, hace un llamado a las autoridades a replantear el horario del curso de Educación Cívica, pues existe una crisis de información en las nuevas generaciones sobre los valores democráticos del Perú.
SIGNIFICADO
Para el docente, la educación cívica y la educación militar, no solo enseña y preconiza todas las virtudes señaladas en los párrafos anteriores, sino exalta el patriotismo.
“Si no se propagara primordialmente el nacionalismo como excelsa virtud ciudadana (verbo y acción de solidaridad) que impone a todos los miembros de una acción el deber de vivir para ella, sirviéndola con fervor en los fines que la conduzcan al progreso y la gloria”, acotó.
Por esto considera, que el desfile es un homenaje que se realiza al aniversario patrio. De igual manera, el colocarse la escarapela, el entonar el himno nacional y demás, pero el amor a la patria va más allá.
El verdadero significado radica en amar al Perú, a nuestras familias, al prójimo, a la naturaleza y a los animales. Por ello, es importante inculcar a las personas, desde que son pequeñas la honradez, la honestidad. Ese es el verdadero amor por la Patria, los demás son signos exteriores, finalizó.