El Museo Arqueológico Nacional Brüning, el primero construido en Lambayeque, celebrará este 10 de julio su nonagésimo octavo aniversario. Este recinto cultural lleva el nombre del ciudadano alemán Hans Heinrich Brüning, en agradecimiento a su indesmayable labor en defensa de la herencia cultural del Perú.
Hans Heinrich Brüning o Enrique Brüning fue un etnógrafo y coleccionista de antigüedades que nació el 20 de agosto de 1848, en la ciudad de Hoffeld, Alemania.
Los habitantes muchik del norte peruano rehuían a los extraños, pero Brüning hizo un trabajo paciente y se ganó su confianza. Esta acogida le valió para quedarse a vivir en Villa de Eten con la intención de estudiar el idioma muchik y más adelante escribir un diccionario de esta lengua originaria que fue publicado en 1917.
MUSEO BRÜNING
La valiosa colección de objetos arqueológicos de Brüning se exhibió, en una primera etapa, desde 1921 hasta 1965, en su primer local que fue la vivienda del investigador alemán, ubicada en la calle Dos de Mayo 271, en la ciudad de Chiclayo.
En 1966 se trasladó a su actual edificio de cuatro pisos diseñado por el arquitecto Celso Prado Pastor. En sus jardines destaca la figura de Naylamp, fundador de la dinastía de los soberanos lambayecanos. La fachada muestra un colorido mural con motivos que identifican a la cultura Lambayeque.
El interior del edificio principal es una secuencia de cuatro niveles, entre sus corredores y salones se exponen más de 1,400 piezas arqueológicas, manifestaciones que fueron legados de las culturas Lambayeque, Moche, Chavín, Vicús, Inca y otras. Las piezas más importantes datan de hace más de 10,000 años.
El museo se divide en varios ambientes de exhibición principales. La Sala Introductoria brinda un panorama general del contenido e historia del museo con ayuda de paneles informativos. También destaca la Sala Multimedia, que corresponde al preámbulo del recorrido por el museo. Mediante una proyección de video se muestra a los visitantes el contenido del recinto cultural, así como aspectos vinculados a la cultura, arte, folclor y tradiciones de la región Lambayeque.
La Sala de Exposición Hans Heinrich Brüning destaca el importante legado arqueológico e histórico de este peruanista a lo largo de su labor de 50 años de vida en nuestro país. Otro ambiente importante es la Sala de los Orfebres o Sala de Oro, donde se conserva una de las más importantes colecciones de orfebrería de América, con alrededor de 500 piezas de oro, plata y piedras preciosas. Algunas de ellas fueron encontradas en la tumba del Señor de Sipán y destacan por su depurada elaboración que las convierte en obras de arte.
Por último, resalta la Sala de Evolución Cultural de la Región Norte. Evidencia la continuidad cultural de las técnicas en música y danza, religión, curanderismo, tradición oral e idioma Muchik. Se recrea una escena de curanderismo y se muestran recreaciones de técnicas en elaboración de “chicha” (bebida ancestral mochica), textilería, arquitectura, agricultura, alfarería y pesca. Se muestra también un caballito de totora en tamaño natural y maniquíes en una escena de pesca.