“Triunfó en el Barcelona y ha sido el único europeo en conquistar el fútbol sudamericano”, señaló al aludir a la primera obtención de Perú de la hoy llamada Copa América. La segunda fue en 1975.
“Liderada por el acierto goleador de Lolo Fernández y su socio Jorge “Campolo” Alcalde, la selección de la banda roja venció a Uruguay en el partido decisivo para conquistar invicto el entonces llamado Campeonato Sudamericano”, rememoró BBC Mundo sobre la gesta deportiva peruana.
La alegría de los aficionados desbordaron las calles de Lima y todo gracias a la influencia de un minero inglés que había aterrizado en el país unos pocos meses antes.
“Su nombre fue Jack Greenwell, quien desde entonces ha sido el único entrenador europeo en conquistar el más prestigioso trofeo del fútbol sudamericano, la Copa América”, resaltó el influyente medio de comunicación.
“Puede sonar desconocido para las nuevas generaciones, pero sin duda fue un personaje importante que influyó positivamente en el fútbol sudamericano”, publicó la Conmebol en un artículo dedicado a su figura.
En el Barcelona
Jack Greenwell nació en 1884 en Crook, un pequeño pueblo que se encontraba rodeado de minas de carbón en el noreste de Inglaterra. Tras salir del colegio se convirtió en minero y comenzó a jugar como carrilero para el Crook Town a los 17 años.
En 1909 fue invitado a jugar para el West Auckland Town cuando ganaron el trofeo Sir Thomas Lipton en Italia, que para muchos historiadores es considerado como la “primera Copa del Mundo”.
Tres años después, Greenwell llegó al Barcelona. “Es probable que había alguien del Barcelona a quien le gustó lo que estaba viendo y quien pasó uno o dos años tratando de persuadirlo para que fuera a jugar allá”.
El futbolista inglés jugó 88 partidos con el conjunto catalán, marcó 10 goles y ganó dos campeonatos de Cataluña, torneo que precedió a la Liga española.
Sin embargo, su mayor impacto ocurrió una vez que se retiró como jugador y fue entrenador del “Barza”. La idea de Greenwell trascendió su época como jugador y entrenador hasta formar parte de la identidad del Barcelona.
Su filosofía era comenzar el ataque desde atrás, pasando el balón entre los jugadores en lugar de tratar de regatear a los rivales. “Él fomentó el estilo de pase y en aquella época eso era muy extraño”.
Greenwell comenzó su periplo al frente del Barcelona en 1913, guiando al conjunto catalán a ganar cinco campeonatos catalanes y dos Copas del Rey.
Trotamundos
Tras un primero período con el Barcelona, Greenwell se hizo cargo en 1923 del RCD Espanyol, con el que ganó dos campeonatos de Cataluña y la Copa del Rey de 1929. Dos años después regresó al conjunto azulgrana, ganando una liga antes de llegar al Valencia y, a raíz del estallido de la Guerra Civil, viajó a Turquía en 1936.
Su vida de trotamundos lo hizo llegar a Perú en 1938 para hacerse cargo de la selección y al mismo tiempo del club Universitario de Deportes, consiguiendo al año siguiente el histórico título de la Copa América y la liga peruana.
“Esos triunfos llamaron la atención de dirigentes colombianos que hicieron lo imposible por contar con el entrenador que había producidos tantos éxitos durante su carrera. Pero dada la inestabilidad que hubo en el mundo a comienzos de los años 40 por el estallido de la Segunda Guerra Mundial, que obligó a la suspensión de torneos internacionales, Greenwell no pudo dejar su huella en la selección colombiana”.