Corresponsales escolares: María Consuelo Rinza Calderón y Fátima Milagros Neira Manayay.– La Asamblea General de las Naciones Unidas, en coordinación con la UNESCO, proclamaron este 2019, como el Año Internacional de las Lenguas Indígenas.
En este contexto, el Club Amigos de la ONU-UNESCO de la I.E. Nuestra Señora del Rosario, organizó el Parlamento Estudiantil 2019, brindando con ello la oportunidad a las escuelas de Cañaris e Incahuasi, de participar para llevar el mensaje de los estudiantes y su comunidad. Venciendo la adversidad del clima, y tras superar las fuertes lluvias, asistieron los miembros de la familia escolar de la I.E. N° 10092 del caserío Sinchihual.
Integrando la mesa del parlamento, la estudiante María Isabel Manayay Lucero manifestó a los participantes, exponiendo en quechua y español, la alegría y el honor de ser indígena quechua y participar de este parlamento que permite expresar nuestras opiniones sobre la importancia de preservar la lengua Quechua como patrimonio de la riqueza cultural de su comunidad; sino también como patrimonio nacional de los peruanos.
La presencia de la delegación enriqueció el debate de las 16 exposiciones de cada representante de los colegios participantes. Las conclusiones a las que arribaron los grupos de trabajo serán elevadas a la sede central de la ONU, en la ciudad de New York, lugar donde el pedido de respeto y consideración a la identidad cultural de la sierra lambayecana será reconocido mundialmente, según lo afirmó Susana Toso de Vera, representante de esa entidad en nuestra región.
Al concluir su mensaje, la estudiante incahuasina María Manayay, expresó su gratitud a sus maestros, en especial al maestro Armando Sánchez Céspedes, director de su escuela, pues dijo son ellos los que hacen posible su presencia en eventos como este que permiten dar a conocer la problemática de nuestra gente indígena, muchas veces ignorada, olvidada y discriminada. Asimismo, expresó la estudiante, estos espacios nos permiten concienciar a nuestra región y al país que somos miembros de una cultura viva que vive y siente, el orgullo de preservar en el tiempo, lo heredado de sus ancestros.
Finalmente, los docentes que acompañaron a sus delegaciones manifestaron que certámenes como este ayudan y fortalecen la identidad regional, desde las escuelas, dando a conocer la problemática de las comunidades originarias como Incahuasi, Cañaris y Salas; problemáticas, que se debatirán próximamente en la sede central de las Naciones Unidas en NewYork.