Con golazos de Edison Flores, Yoshimar Yotún y Paolo Guerrero la Selección Peruana acabó con el reinado de Chile, vigente campeón de las dos últimas ediciones del torneo, en el Arena do Gremio de Porto Alegre y el domingo será rival de Brasil en la final de la Copa América 2019.
Los peruanos, que jugarán en el Maracaná su primera final de Copa América en 44 años, se cobraron así la revancha de hace cuatro años, cuando en la edición de 2015 Chile, que era el anfitrión, los dejó fuera de la final.
Perú hizo su mejor partido en esta Copa América. El equipo dirigido por el argentino Ricardo Gareca se reencontró con su mejor fútbol casi un año después y lo hizo en el mejor momento para escribir otra página más en letras doradas de la historia del fútbol peruano, como en 2018 volvió a un Mundial después de 36 años.
La escuadra “rojiblanca” aprendió de sus errores anteriores y con un sistema de juego práctico le cortó los circuitos a los sureños. El “equipo de todos” salió decidido que era digno de jugar una final y completó un partido perfecto donde arrolló a “La Roja”, que parecía contagiada y agarrotada por la fría noche de Porto Alegre.
Antepuso el trabajo táctico y apeló al contragolpe con un Paolo Guerrero concentrado. Fue alimentado por Christian Cueva y Miguel Trauco. Ambos se despojaron de sus discretas actuaciones del inicio del torneo.
Atrás la figura de Carlos Zambrano destacó por su férrea marca a Alexis Sánchez, Arturo Vidal y Eduardo Vargas que tampoco aparecieron gracias a la marca incisiva de Tapia y Yotún.
Comenzó el baile
El primer gol pudo llegar a los 2 minutos con un disparo de Carrillo a poca distancia de la portería que se fue desviado, pero a los 20 la ilusión peruana obtuvo premio con un remate de Edison Flores, que puso en ventaja a la “Blanquirroja” con un disparo cruzado, tras cazar un balón que tocó de cabeza Carrillo.
El tanto no bajó las revoluciones de Perú, y antes del descanso logró el segundo en el minuto 38, gracias a un disparo a placer del centrocampista Yoshimar Yotún, después de que el arquero chileno Gabriel Arias abandonase su portería para intentar frenar sin éxito una cabalgada de Carrillo por la banda derecha.
En el segundo tiempo, Perú mantuvo el orden y contrarrestó las arremetidas de los chilenos, que de manera desesperada buscaban vulnerar el arco de Pedro Gallese, quien estuvo “enorme” ante cada incursión de los “mapochos”.
Pero faltaba la guinda para Perú, y ese era el gol de su capitán y máximo goleador histórico, Paolo Guerrero, que definió en el tiempo con una clase magistral y a sangre fría, como los mejores delanteros, ante Arias.
No era la noche de Chile, que incluso desperdició un penal en el último minuto por medio de Eduardo Vargas, cuyo disparo lo lanzó a lo Panenka, fue controlado por Gallese que paró todo lo que se le probó.