Con el fin de incrementar la demanda y el consumo del pisco en el país asiático de China, la embajada peruana en el gigante asiático llevó a cabo un tour de promoción de la bebida de bandera nacional por las ciudades de Beijing, Shanghái, Macao y Zhuhai.
Esta gran iniciativa consistió en una cata a cargo de la sumiller peruana Lucero Villagarcía, y contó con la participación de ciudadanos chinos asociados a hoteles, bares y restaurantes, a fin de que puedan apreciar la calidad del pisco.
“Estas actividades son producto del esfuerzo de la Cancillería y las embajadas (Perú y China) por promover el pisco. Con ello se abre la posibilidad de incrementar la demanda”, declaró el embajador de Perú en China, Luis Quesada, a la Agencia Andina.
Según señaló, la respuesta en el país de China ha sido muy positiva y ratifica la necesidad de seguir promoviendo el pisco, puro y en cócteles como el pisco sour, capitán o chilcano.
“Tiene un sabor indiscutible, tanto puro como en cócteles. Se puede tomar como aperitivo o digestivo; además de ser una bebida con historia, pues data del siglo XVI”, recordó.
Por su parte, la sumiller Villagarcía sostuvo que las catas efectuadas serán de mucho provecho para la demanda del pisco en el asiático país de China, al subrayar el interés mostrado por conocer lo que Perú ofrece.
En sus presentaciones, la especialista explicó a los asistentes que el pisco es una denominación de origen, que se prepara hace más de 400 años y que la producción se concentra en las regiones de Lima, Ica, Arequipa, Moquegua y Tacna.
“Hemos llegado a China con ocho uvas pisqueras, entre ellas mollar, criolla, uvina, italia, moscatel. Los participantes han aprendido a saborear el pisco y preparar cócteles”, comentó.
Para Villagarcía, la cata es una manera importante de promover el pisco, considerando que los chinos están abiertos a conocer nuevos productos.
Se debe destacar que la marinera norteña y la narrativa, así como la gastronomía peruana cautivaron a los asistentes del festival Día E, que el Instituto Cervantes de Beijing, el país asiático de China, donde se llevó a cabo el evento cultural para rendir un homenaje a la lengua española y a los países que la emplean.