Ginebra, 24 diciembre (EFE).– El relator de la ONU sobre los derechos de los migrantes, Felipe González Morales, reclamó hoy a las autoridades de Estados Unidos que se investigue la muerte de la niña migrante guatemalteca en custodia de la Patrulla Fronteriza y que cese la detención de menores migrantes por ser una violación del derecho internacional.

 

“Como ha sido expresado por varias instancias de derechos humanos de la ONU, la detención de niños en función de su estatus migratorio es una violación del derecho internacional”, señaló.

 

Se considera que la detención va contra el bienestar de cualquier niño y le genera efectos adversos a largo plazo al empeorar el trauma que los pequeños migrantes ya sufren durante sus travesías.

 

“La detención de niños nunca debe usarse para disuadir la migración”, recalcó el chileno González.

 

La niña Jakelin Caal murió el pasado día 8 cuando se encontraba bajo custodia de la Patrulla Fronteriza, tras ser interceptada con su padre, con quien había atravesado, junto con más de un centenar de migrantes, la frontera por el desierto de Nuevo México.

 

Unas ocho horas después de su detención, Jakelin empezó a convulsionar y fue trasladada con fiebre altísima a un hospital, donde llegó con un paro cardíaco y falleció.

 

La Patrulla Fronteriza sostiene que el desenlace se debió a que la menor llevaba días sin beber ni comer.

 

Como experto de la ONU sobre los derechos de los migrantes, pidió una investigación exhaustiva sobre este caso, uniéndose a una petición similar del Gobierno de Guatemala.

 

González ha pedido dos veces al Gobierno de EEUU que se le permita realizar una visita oficial al país, en la que en función de su mandato debería poder visitar centros de detención de inmigrantes y entrevistarse con ellos. pero no han respondido a sus solicitudes.