Corresponsales escolares: Edwin Franklin Neira Llaguento y Néstor Alexander Carrillo Carrillo.– “La algarabía nos tiñó con su velo festivo, y no es para menos porque no estamos soñando, ya son 60 años de vida institucional al servicio de la colectividad moyandina”, fueron las sinceras y emotivas palabras de nuestro director José Enrique Correa Fernández en su discurso de apertura con motivo de las celebraciones de las Bodas de Diamante.
Un colorido pasacalle que recorrió nuestra comunidad de Moyán dio inicio a los festejos. Acto seguido, las Olimpiadas deportivas mostraron las habilidades de estudiantes y docentes en las diversas disciplinas. En la fiesta del deporte, los primeros lugares en fulbito de varones y damas, lo obtuvieron los equipos de 2° “B” y 5° grados de secundaria; en tanto que, durante la tarde deportiva con escuelas vecinas de Oxapampa, Huayrul y Canchachalá, el trofeo de fulbito y voley se quedó en casa.
La nota emotiva, se dio con la presentación de la exposición fotográfica en la que se mostró imágenes que ilustraban sobre los 60 años de labor, material preparado por nuestro director. Infaltable además, como parte del fortalecimiento de nuestra identidad cultural también, llevamos a cabo la elección de nuestra Shipash (doncella) de Aniversario, adjudicándose el título la estudiante Katherin Licet Díaz Sánchez, del 5° de Secundaria.
El programa también consideró la competencia de Oratoria y Declamación, que permitió descubrir nuevos talentos, entre los que se cuentan: José Emilio Gómez Bernilla, Maribel Carlos Vilcabana, Isaías Paz De la Cruz; Melisa Llaguen Mnanayay, Yanina Eliseth Céspedes De la Cruz, Luz Mari Llaguento Vilcabana, Elmer Bernilla Huamán y Wilmer Agusto Díaz De la Cruz, en tanto que en dibujo y pintura destacó nuestro compañero corresponsal, Edwin Franklin Neira Llaguento.
En el día central, la familia escolar elevó plegarias de gratitud, por estas seis décadas de labor, en liturgia oficiada por las Religiosas Misioneras de Jesús Verbo y Víctima de Incahuasi; acto seguido la actuación central y el almuerzo de confraternidad unieron a nuestra comunidad moyandina.
El cierre de fiesta se dio con la divertida yincana escolar, con el desarrollo de juegos de antaño como la carrera de encostalados, jalar la soga, entre otros. De esta manera se compartió un conjunto de actividades caracterizados por la alegría y la unión de voluntades en los 60 años de vida de nuestra querida escuela.