América Latina y el mundo están de luto. En medio de un ambiente de tristeza y consternación, ayer, miles de personas de Tulyehualco, ubicado al sureste de Ciudad de México, despidieron a la niña de siete años que fue hallada muerta este fin de semana.
En las demás vías, sobraban las muestras de dolor y solidaridad con los parientes. Atónitos, los pobladores miraban las veladoras puestas al pie de fotografías de la niña en un altar improvisado.
Sobre su ataúd, cubierto con flores y una manta blanca, reposaba un oso de peluche, mientras una banda de mariachis acompañaba la procesión que pasó primero por la escuela donde estudiaba.
SOSPECHOSOS
En tanto, la Fiscalía General de Justicia (FGJ) de la Ciudad de México otorgó información sobre la identificación de dos presuntos implicados en el caso de Fátima.
Los sospechosos han sido identificados como Gladis Giovana Cruz Hernández y Mario Alberto Reyes Najera. Según anunciaron las autoridades correspondientes, se solicitarán las órdenes de aprehensión correspondientes.
Ulises Lara, vocero de la FGJ de la Ciudad de México, aseguró que se encontraron prendas de vestir que permitieron conocer la identidad de la mujer que se llevó a la niña, tras un cateo realizado en la colonia San Felipe de Jesús, en la alcaldía de Xochimilco.
Lara aseguró además que la fiscalía está solicitando apoyo de todos los elementos de fuerza, con la finalidad de encontrar a los responsables del feminicidio de la pequeña Fátima.