Grecia debe intervenir de emergencia para mejorar las condiciones miserables e inaceptables en los campamentos de migrantes sobrepoblados, exhortó el Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados, de visita en la isla de Lesbos.

 

“Esas condiciones de vida requieren una mejora urgente”, expresó el jefe del Alto Comisionado para los Refugiados (ACNUR), Filippo Grandi, tras visitar el campamento de Moria, donde están 13 mil migrantes, el triple de su capacidad.

 

“Cualquiera que sea la situación de estas personas, no podemos aceptar que vivan en condiciones tan miserables, expuestos a la violencia y la explotación”, agregó el funcionario, quien realiza una visita de dos días a Grecia, la principal puerta de entrada de migrantes de Europa.

 

Su visita se produce en momentos en que el gobierno griego anuncia un vasto programa de revisión de los campamentos de solicitantes de asilo en las cinco islas egeas, las más expuestas, debido a su proximidad con Turquía.

 

Según las autoridades griegas, actualmente hay más de 39 mil solicitantes de asilo en las islas de Lesbos, Samos, Quíos, Leros y Cos, a las que siguen llegando centenares a diario.

 

El gobierno conservador de Kyriakos Mitsotakis anunció la semana pasada el cierre de los tres campamentos más superpoblados e insalubres y su sustitución por centros cerrados, para triplicar la capacidad de acogida en las islas de Lesbos, Samos y Quíos.

 

También prometió la devolución a Turquía de 10 mil personas cuya solicitud de asilo fue denegada y el traslado de 20 mil solicitantes de asilo al territorio continental griego.

 

Sin embargo, según la Organización Internacional para las Migraciones, los campamentos del continente ya albergan a 22 mil personas y casi sobrepasan su capacidad.