El Telégrafo (Ecuador).– Las redadas masivas hacia los indocumentados en Estados Unidos –programadas para el domingo– fueron atrasadas por dos semanas, anunció el mismo presidente Donald Trump.
El mandatario estadounidense tuiteó que: “demócratas y republicanos deben encontrar juntos una solución a los problemas del asilo y los agujeros en la frontera sur”. El tuit concluye: “Si no, ¡empiezan las deportaciones!”.
De acuerdo con el diario The New York Times, las redadas se iniciarán con el destierro de 2.000 personas que ya tienen una orden de deportación, pero que no la han cumplido. En algunos casos las familias completas serán detenidas, mientras que en otros, los niños nacidos en EE.UU. serán separados de sus padres indocumentados.
El objetivo de estas redadas, con las que Trump ha amenazado durante mucho tiempo, es crear un elemento disuasorio: esperan que los arrestos persuadan a otras familias de los países centroamericanos de buscar asilo en la frontera.
El diario estadounidense cita a dos trabajadores y un extrabajador anónimos del equivalente al Ministerio del Interior estadounidense, que relatan cómo la Policía de inmigración (ICE, por sus siglas en inglés) llevará a cabo operaciones en 10 ciudades en los siguientes días.
De acuerdo con The Washington Post, horas antes de la postergación anunciada pro Trump, los demócratas presentaron una propuesta para: que las separaciones familiares sean ilegales; invertir más recursos en el apoyo legal para los solicitantes de asilo; y reforzar las normas humanitarias para el tratamiento de las familias y los menores de edad.
Este proyecto está encabezado por el senador Jeff Merkley y el líder de la minoría del Senado, Chuck Schumer y copatrocinada por tres docenas de senadores demócratas, incluidos los candidatos a la presidencia.