Una organización criminal robó al Ejército peruano más de S/ 10,1 millones, desde el año 2018, en pensiones, devengados, reintegros y seguros de vida de 82 soldados que nunca existieron, según revela este domingo un diario limeño.
La red estaría conformada por más de 112 personas, algunas ya identificadas, entre militares de diversos grados, hasta oficiales generales, personal auxiliar y civil, según la Procuraduría del Ejército y la Fiscalía Supraprovincial Corporativa Anticorrupción.
¿Cómo cobraban?
Los integrantes de la organización criminal captaban a personas que deseaban ser pensionistas del Ejército con solo una copia de DNI y la firma de algunos documentos falsos. Estos eran obtenidos en municipalidades de centros poblados de provincias o simplemente falsificados.
Luego los documentos originales eran reemplazados dentro de la institución militar con los papeles falsos y así surgían los “soldados fantasmas”. Posteriormente, se acompañaba a los “beneficiarios” al Banco de Comercio para abrir las cuentas donde el Ejército depositaría las pensiones, pero se quedaban con las tarjetas de débito.
Finalmente, los integrantes de la red criminal acompañaban a los falsos pensionistas para retirar los montos. Ahí les daban una parte del dinero a los “beneficiarios” y la mayor parte del monto quedaba en la banda delincuencial. Incluso se obtenían préstamos en el Banco de Comercio e Interbank.