La guitarra que Kurt Cobain utilizó en el MTV Unplugged que se grabó cinco meses antes de su muerte, se vendió este fin de semana por seis millones de dólares en un evento organizado por la casa de subastas Julien's Auctions en Beverly Hills.
El comprador dispuesto a desembolsar esta impresionante cifra es un empresario australiano llamado Peter Freedman, que acudió a la puja en persona y ahora planea exponer su nueva adquisición en galerías de arte y exhibiciones en distintos lugares del mundo. Según adelantó, los fondos que recaude de esta manera se destinarán a ayudar a artistas de la industria discográfica que se han visto afectados por la crisis del coronavirus. Eventualmente plantea venderla y destinar el dinero a esa misma causa.
En un principio se esperaba que el instrumento superara los dos millones de dólares como mucho, pero ha superado todas las expectativas. El modelo 1959 Martin D-18E se ha convertido así en la pieza de memorabilia y en la guitarra más cara de la historia. El récord anterior lo había establecido una Stratocaster de color negro que había pertenecido a David Gilmour, de Pink Floyd, que en 2019 alcanzó los 3,95 millones de dólares en una subasta.
Se cree que la venta se ha producido sin el consentimiento de la familia del fallecido músico. La guitarra estaba en poder de la única hija de Kurt Cobain, Frances Bean, que se la regaló a su ahora exmarido Isaiah Silva tras su boda. La joven trató de recuperar el instrumento en varias ocasiones desde su divorcio y recurrió sin éxito a la justicia para obligar a su ex a que se la devolviera. Todo apunta a que Isaiah se encuentra detrás de su aparición en la subasta.