Clarín (Argentina).– Irán ha regresado al centro de las preocupaciones mundiales. Al punto que desde Occidente, con Estados Unidos a la cabeza, hasta China y Rusia, aliados centrales de la potencia persa, se repite un mismo mensaje para que Teherán dé un paso atrás y se mantenga dentro de los límites del acuerdo nuclear de Viena de 2015. Israel ya anunció preparativos para un eventual conflicto armado en la región.

 

Esto es debido a que Irán anunció el último fin de semana que acumula uranio enriquecido por encima de los 300 kilogramos que permitía aquel pacto destinado a congelar su desarrollo atómico.

 

Ha sido su primera violación de este convenio histórico. La novedad es especialmente grave en medio de la creciente tensión en Oriente Medio, con despliegue de buques misilísticos y un portaaviones norteamericanos que alimentan los temores de una guerra que solo necesita un pretexto para desatarse.

 

Israel, un enemigo central de la teocracia iraní, dio ayer sentido a esos temores al avisar que el país se esta preparando militarmente de cara a la posibilidad de que estalle un conflicto en la región.

 

“Debe tenerse en cuenta que los cálculos equivocados del régimen (iraní) (...) podrían hacer que se pase de la ‘zona gris’ a la ‘zona roja’, que es una conflagración militar”, ha sostenido el canciller israelí, Israel Katz.”Debemos estar preparados para eso y por ello el Estado de Israel sigue decidido a aumentar su poderío militar de cara a una situación en la que tenga que responder ante escenarios de recrudecimiento”, agregó.